Conocimiento – Realidad

Conocimiento y realidad son conceptos muy interrelacionados, interdependientes. Si creo que la realidad es algo fijo e inmutable y que los cambios son pasajeros como decía Parménides, entonces la actividad del sujeto cognoscente consistirá en ir acumulando un conocimiento tras otro hasta completar el mapa de al realidad, por muy complejo que sea, algún día llegaremos a su término para gozar en la contemplación del conocimiento total.

Si concebimos la realidad como cambiante, semejante a la imagen del río que decía Heráclito, de que nadie puede bañarse dos veces en el mismo río porque nuevas aguas correrán sobre él, y la permanencia es inmutable, entonces nunca podremos agotar el conocimiento porque la realidad estaría en constante cambio.

Ambas posiciones tienen parte de razón porque como seres humanos somos siempre los mismos pero no siempre lo mismo. Y la realidad que nos rodea es la misma pero con modificaciones constantes. Por tanto nuestro conocimiento de esa realidad la misma y cambiante también deberá tomar en cuenta esas características, lo cual es altamente complicado y por eso el conocimiento es un problema.

Algunos autores hablaban de un estructuralismo genético como una posible respuesta que incluye conocer la estructura de las cosas, pero también su origen y su orientación al futuro. Para conocer la estructura, dirá Karel Kosik, se trata de una combinación de fenómeno y esencia, donde el fenómeno oculta la esencia pero al mismo tiempo manifiesta parte de ella (porque de lo contrario sería otra cosa distinta; y la esencia a su vez se manifiesta a través del fenómeno al mismo tiempo que se oculta. El conocimiento consistiría en destruir la pseudoconcreción para llegar a lo concreto. Y el mejor modo es a través de la praxis de transformación.

De modo que la realidad sería una combinación de fenómeno y esencia, de génesis y estructura dentro de un contexto histórico-social.